28.8.10

...Y su reflejo.

... Y señalados por el reflejo de la Luna, a la luz de sus ojos, haciendonos testigos de la fuerza por la que eran arrastrados, sin dar crédito de lo que les estaba pasando, sitiendose cada vez mas cerca el uno del otro y unidos por un sin fin de caricias.
(El Pez Testigo)